Alguna vez fui tan adolescente que repugnaba el amor
pero aunque no recuerdo el momento exacto, todo cambio al fin
fue una mañana de domingo o un lunes, cualquier dia donde me deje enseñar (y sin pensarlo)
como si de mi alma naciera un nuevo brote de naturaleza, fue un inquilino que vino para quedarse

Logro pasar el tiempo entre lluvia y desolación, a veces la falta de luz invito a la soledad más vagabunda, de la nada a la gloria, de la locura a la pasión, llenar sus ojos es un elemento divino,
y pobre de los que intenten entenderlos, la creación siempre es inexplicable
Paso a paso creceras, vas a ser las estrellas sin pensarlo, estaras en un cielo de dos que no queme.
Perdón por no haber sido lo que esperabas, el timbre sonó y sin escucharlo como un niño llegue tarde.
Perdón por abrir las heridas y bucear tan saladamente, aprenderas a cerrarlas aunque no este ahi.

Pero de todas maneras siempre estare allí, una parte tan grande de mi ya no me pertenece, es tuya.

 
©2009 Augusto Rivarola | by TNB